Los implementos deportivos son todo un mundo pues nos ofrecen miles de posibilidades dentro de una misma práctica. Son tan versátiles que tiene la capacidad de facilitarnos algunos ejercicios o posturas y a la vez pueden agregarle complejidad a nuestro entrenamiento.
Hay muchos tipos de implementos en el mercado y cada día aparecen nuevos, podemos encontrar algunos propios de ciertas disciplinas, como lo son por ejemplo el “Aro de Pilates” (correspondiente a Pilates), también están los “Block de Yoga” (pertenecientes a Yoga), etc. Podemos encontrar otros que son transversales a casi todas las disciplinas, como el es el caso del mat y aún así podemos encontrar muchos tipos de mat completamente diferentes entre sí.
Pero ¿cómo saber qué implemento usar?
La tarea no es tan simple como parece, primero es fundamental saber cuáles son nuestras metas personales para así poder determinar cuál implemento será más beneficioso según nuestros objetivos. Por ejemplo, si queremos trabajar fuerza/tonificación de brazos seguramente un par de mancuernas serán ideales, pero si queremos trabajar nuestro equilibro y el reconocimiento de nuestro centro de gravedad un balón será mucho mas acertado.
Segundo, tenemos que contemplar nuestras capacidades personales. Por ejemplo, si queremos agregar bandas elásticas a nuestra práctica, pero nunca las hemos utilizado, siempre es será más recomendable comenzar con aquellas de menor resistencia y luego ir aumentando de resistencia de forma progresiva.
Tercero, es muy común elegir implementos sólo por que están de moda o porque tu amigo(a) lo usa. La idea de un implemento es que logremos un equilibrio con él, es decir, que sea capaz de entregarnos comodidad y a la vez dificultad. Por ejemplo, es muy común que la inestabilidad de un balón genere incomodidad en algunas personas, en especial en quienes tienen vértigo, por lo que les resulta casi imposible ejercitarse con un balón. En este caso el balón no sería el implemento ideal y nos inclinaremos más por implementos que se enfoquen en trabajos de tipo estáticos.
Finalmente, y no por eso menos importante, la calidad del producto que elijamos será fundamental. Podemos encontrar en internet miles de productos muy baratos, pero no aseguran calidad y con esto se hace referencia principalmente a durabilidad y comodidad al momento de utilizarlos. Por ejemplo, comprar balones que no capaces de resistir nuestro peso y tienden a reventarse, mats de mala calidad que se rompen con facilidad, aros de Pilates que no cuentan manillas ergonómicas por lo que se resbalan constantemente entorpeciendo nuestra práctica, entre muchos otros casos. En conclusión, lo ideal al momento de comprar un implemento es poder asesorarnos con alguien de confianza que realmente tenga conocimiento sobre el tema.